viernes, 17 de diciembre de 2010

MONTAJE EN EL ARTICULADOR, SELECCIÓN Y ARTICULACIÓN DE LOS DIENTES

Terminología
Montaje en el articulador. Procedimiento de laboratorio mediante el cual ibican los modelos de trabajo en el articulador, en la misma posición, con respecto a las articulaciones Temporomandibulares del paciente y con la ayuda de un arco facial.
Selección de dientes. Elegir las piezas dentales según su forma, tamaño y color y según las características individuales de cada paciente. Articulación de dientes. Colocación de los dientes artificiales en los rodillos de oclusión, a fin de que cumplan con objetivos concretos, tales como mejor función y estética posibles. Oclusión balanceada. Se entiende como una oclusión armoniosa de los antes, donde existan contactos simultáneos en las posiciones de relación céntrica y en los movimientos excéntricos, dentro de los rangos funcionales de masticación y deglución.


La técnica de articulación de dientes tiene el objetivo de lograr una oclusión balanceada.


Materiales e instrumental necesarios: articulador semiajustable, espátula de lecrón,
espátula 7A, regla milimétrica flexible, bisturí con hoja, taza de hule, espátula para yeso,
yeso para montaje de modelos, vaselina y lámpara de alcohol.
Una vez que el operador ha determinado las relaciones craneomandibuiares y ha obtenido el registro de la posición del maxilar, con el arco facial se preparan los modelos para ser montados en el articulador. Primero se realizan, con el bisturí, cuatro muescas en la base de los modelos para crear las guías de remontaje; las muescas se ubican de la siguiente manera: una en la parte más anterior, dos a nivel de los caninos y la cuarta en la parte más posterior del modelo.

Las muescas deben tener forma triangular, ser expulsivas y con una profundidad de 3 a 5 mm, dependiendo del tamaño del modelo. Se aplica vaselina en las muescas y en el centro del modelo con objeto de que el yeso de montaje no se adhiera fuertemente al yeso del modelo, y de esta manera se puedan conservar intactos los registros de montaje para poder realizar el remontaje. Se coloca el registro del arco facial en el articulador,  y se monta con yeso blanco el modelo del maxilar 

Una vez que ha fraguado el yeso del montaje del modelo superior, se ubica y se monta el modelo inferior  según las relaciones craneomandibulares que el operador obtuvo en el paciente.

A continuación se seleccionan los dientes en la siguiente secuencia: a) con la regla flexible se mide de la línea del canino hacia la línea media y de la línea media hacia la línea del canino del lado opuesto; b) a la medida
obtenida, que en este caso en particular es de 40 mm, se le agregan 2.5 mm de cada lado, ya que las líneas de los caninos corresponden a las cúspides y no a las caras distales, dándonos en total una medida de 45 mm de canino a canino. 

Seleccionamos los dientes ubicándolos en el catálogo (a) de la siguiente manera: los dientes superiores se
encuentran en la parte superior e izquierda; los inferiores, en la parte superior y media, del lado derecho, y los posteriores en la parte inferior izquierda La medida que se obtuvo de 45 mm se ubica en el catálogo en la zona de los dientes superiores; en este caso corresponde al modelo 133, el cual tiene un 
diente central cuya anchura es de 7.5 mm y por 8.75 mm de largo.


Con este modelo seleccionado nos ubicamos en la tabla de relaciones que está en la parte inferior e izquierda de la tabla, en donde observamos que el modelo 133 articula con el modelo 2C de dientes anteriores inferiores.

En la zona de dientes inferiores se observa que el modelo 2C tiene un central de 4.5 mm de ancho por 8.25 mm de altura; que los seis dientes miden 33.5 mm de canino a canino y que armonizan con los modelos 133 y
A23 de dientes superiores.

Los dientes posteriores se seleccionan de la siguiente manera: se mide la distancia de la cara distal del canino inferior a la parte anterior de la papila piriforme; la medida obtenida corresponderá al ancho mesiodistal de
los cuatro dientes posteriores. En el catálogo se tienen diferentes opciones, que van desde 29 hasta 34  milímetros de ancho Con respecto a la altura se tienen tres opciones, que son: S = pequeños, M = medianos y L = largos.



Una vez seleccionado el tamaño de los dientes, deberá escogerse el color de los mismos de acuerdo con el análisis y elección del operador.

La técnica para colocar los dientes consiste en elaborar un nicho, eliminando la cera, para dar lugar al diente que se va a colocar, y procurando que los dientes no queden fuera de las proporciones que se tienen en los rodillos de oclusión. 


Los primeros dientes que se articulan son los centrales superiores (a), que deberán tocar el plano de oclusión, y cuyos cuellos habrán de estar ligeramente distalizados, de modo que, en una vista lateral, se observarán con los cuellos ligeramente deprimidos 



Los dientes laterales superiores deberán estar separados del plano de  oclusión de 0.5 a 1 mm (a) y su cuello estará distaíizado de modo que en una vista lateral el cuello se verá ligeramente deprimido 


La cúspide de los caninos superiores deberá tocar el plano de oclusión, y su cuello estará igeramente distaíizado (a); en una vista lateral, su eje logitudinal será casi paralelo a la cara  vestibular del rodillo de oclusión 

En una vista oclusal los seis dientes anterosuperiores deberán seguir la curvatura del arco y estar en el centro de proceso del maxilar A continuación se  articulan los dientes anteroinferiores, empezando por los centrales, los cuales se colocan  siguiendo los traslapes vertical y horizontal, que deberán medir en promedio 1.5 mm por 1.5mm, respectivamente (a); de esta m.ineici los cliente anteriores no tendrán contacto y se  estará formando la guía anterior 

Los dientes laterales inferiores deberán articularse con los cuellos ligeramente distalizados,
cuidando que los bordes incisales toquen en la misma línea imaginaria que tocan los centrales.



Los caninos inferiores se articulan con el cuello ligeramente distalizados (a), en tanto que las cúspides en contacto con la ínea imaginaria, tocan los bordes incisales de los dientes centrales y laterales 



En una vista lateral de los tres dientes anteroinferiores se observará que el cuello de los entrales está ligeramente deprimido, que el eje longitudinal respecto del lateral es recto con respecto al plano de oclusión, y que el canino tiene ligeramente prominente su cuello.





En el rodillo inferior se marcan las líneas de referencia para articular adecuadamente los  dientes superoposteriores, y se coloca una regla flexible en la cúspide del canino, siguiendo el centro del proceso mandibular, independientemente de la orientación vestibulolingual del rodillo (a), mientras que el otro extremo de la regla se ubica al final del modelo por atrás de la papila piriforme. Por último, sobre el rodillo, con una espátula de lecrón, se marca una línea en ambos lados de la mandíbula 



Con una hoja para bisturí se corta la mitad vestibular del rodillo inferior cuidando de que el corte sea lo más nítido posible para que la línea que representa el centro del proceso sea continua, ya que en referencia a esta línea estarán articuladas las cúspides palatinas (cúspides de rabajo) de los dientes posterosuperiores.



El primer diente posterosuperior que se articula es el primer premolar, el cual será colocado con su eje longitudinal recto y la cúspide palatina haciendo contacto con la línea del rodillo  inferior, que representa el centro de proceso inferior y la cúspide vestibular a 0.5 mm por arriba del plano de oclusión.

El segundo premolar se articula de igual manera que el primero. 

El primer molar solamente toca la cúspide mesiopalatina con la lina del rodillo inferior,  levándose las demás cúspides para empezar a formar la curva de compensación. Siguiendo con la formación de la curva de compensación el segundo molar se articula sin contacto alguno con el plano de oclusión.



Para asegurar una adecuada intercuspidación el primer diente inferior que se articula es el primer molar. La fosa central de este diente ocluye con la cúspide mesiopalatina del primer molar superior, lo que ocasiona que la cúspide mesiovestíbular del primer molar superior quede en relación con el surco que está entre la cúspide mesiovestíbular y la cúspide media del
primer molar inferior.



Es conveniente realizar movimientos de lateralidad para verificar que se esté dando la oclusión balanceada. Al articular en una adecuada posición el primer molar (a), se facilitará la colocación del segundo molar en una correcta oclusión, de acuerdo con la geometría que el fabricante diseñó en las caras oclusales  


En el movimiento de lateralidad, en el lado de balance, deberá seguir observándose contactos dentarios o en su defecto estar muy cerca de obtenerlos. 



El segundo premolar automáticamente cae entre los dos premolares superiores, en donde se logra su máxima intercuspidación.



Cuando los primeros dientes inferiores más posteriores se han colocado en una adecuada oclusión, se puede tener el riesgo de que el primer premolar inferior no tenga suficiente espacio  mesiodistal (a). La solución de este problema es sencilla; consiste en desgastar ligeramente con un fresón las c a r a s proximales (b) hasta lograr la medida exacta del espacio disponible, y de esta manera lograrla completa intercuspidacion de todos los dientes superiores e inferiores 



Al terminar de articular los dientes inferiores'se verifican las siguientes características:
a) que los surcos centrales de los dientes inferiores coincidan con el centro del proceso andibular; b) que existan contactos dentarios posteriores en un movimiento de lateralidad en el lado de trabajo, y c) que existan contactos dentarios en un movimiento de lateralidad en el lado de balance.



Después de haber articulado un lado se lleva a cabo el mismo procedimiento y secuencia en el lado contrario (a), a fin de articular todos los dientes y cuidando la existencia de los contactos dentarios en un movimiento de lateralidad 


Para ajustar las guías condilares en másales del articulador es necesario que el operador obtenga un registro craneomandibular de un movimiento de protrusión, el cual puede obtener con un material de impresión de consistencia pesada.



El registro interoclusal se coloca entre los dientes y se cierra el articulador en relación céntrica (a); en esta posición es normal que los dientes no encuentren un acomodo adecuado en el registro, ya que éste fue obtenido en una posición diferente 



Para ajusfar las guías condilares del articulador, se realiza un movimiento simultáneo de  protrusión de las guías condilares (a) hasta que los dientes superiores e inferiores coincidan con el registro 
Los objetivos de la calibración del articulador son individualizar los movimientos mandibulares del paciente y lograr una oclusión balanceada de todos los dientes, en donde al existir movimientos de lateralidad hacia cualquier lado deberá haber contarlos dentarios simultáneos
del lado de trabajo y del lado de balance 

Para obtener una mejor función fonética, en ¡a zona del paladar, es recomendable utilizar ceras calibradas con la forma de las rugas palatinas 

Las dentaduras se sellan con cera rosa en su periferia y se festonean. 



Finalmente, las dentaduras se vuelven a montar en el articulador para verificar que las posiciones de los contactos sean adecuados. 

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